El Intendente Nicolás Olivera efectuó este miércoles una nueva recorrida por el interior departamental, en cuyo transcurso protagonizó reuniones de coordinación con alcaldes y constató el avance de obras de urbanización en los alrededores de dos complejos Mevir de Piedras Coloradas y de pavimentación en las calles internas de Merinos.
Urbanización en Piedras Coloradas
Acompañado por la coordinadora de Descentralización, Gabriela Gómez y por el arquitecto Juan Turbán, Olivera visitó en primer término la localidad de Piedras Coloradas, donde se reunió con el alcalde Jhon Cáceres y recorrió las obras de urbanización de los complejos Mevir III y IV.
Cáceres informó que esta intervención “consiste en la conformación de cordón cuneta y aplicación de tratamiento bituminoso” en un barrio que se construyó hace aproximadamente seis años, en tanto el avance de obra ronda el 70 por ciento en lo que respecta a generación de cordón cuneta.
En los próximos días comenzarán las tareas de nivelación de calles para posibilitar la fase de pavimentación.
El alcalde recordó que desde el Concejo Municipal se eligió este barrio para la ejecución de este proyecto debido a que este sector ya cuenta con servicios como saneamiento, redes de agua potable y línea subterránea de fibra óptica.
Esta intervención complementa lo ya ejecutado en el barrio “El Sapo”, desde donde se establecieron las correspondientes conexiones con la zona de los nuevos complejos Mevir.
Olivera destacó el impacto de esta intervención en Mevir y también la gran cantidad de proyectos que se planifican desde este municipio, siempre “con la Intendencia apoyando”.
Calles internas en Merinos
Luego de la visita a Piedras Coloradas, las autoridades se trasladaron a Guichón y desde allí, acompañadas por el alcalde Martín Álvarez, continuaron hacia la zona de Merinos recorriendo el recientemente pavimentado camino que une Piñera con Morató.
Álvarez informó que avanza la ejecución de un programa de pavimentación de alrededor de 150 calles internas en las localidades de Piñera-Beisso, Merinos y Morató.
“Estamos hablando de entre un 60 y un 80 por ciento de cada centro poblado bituminizado”, indicó el alcalde, quien recorrió la zona en obras en Merinos acompañado por Olivera y las demás autoridades.
Estas obras -añadió- se ejecutan “con un gran aporte que hace la Intendencia de Paysandú”, que “está haciendo obras en todos los rincones del departamento”, poniendo en práctica una política de “descentralización pura, con hechos”.
Adelantó que las tareas de pavimentación en Merinos estarán listas en los próximos días y posteriormente los operativos se trasladarán hacia Morató, para finalizar en Piñera-Beisso.
Las autoridades recorrieron las calles que son intervenidas, dialogaron con los funcionarios y también mantuvieron breves encuentros con vecinos que observaban el trabajo de la maquinaria y se acercaban a expresar su gratitud por el avance de trabajos que cambian sustancialmente el entorno y la dinámica de la localidad.
Obras que “reconfortan”
“Escuchar a Elena, una vecina de Merinos con sus 90 años y con 14 hijos, decir que nunca había visto tan lindo al pueblo, levanta el espíritu a cualquiera”, subrayó el Intendente Olivera, quien se detuvo en más de una oportunidad para compartir impresiones con quienes son los verdaderos beneficiarios de los trabajos.
El Intendente aseguró que la pavimentación de calles internas constituye un óptimo complemento para la reciente intervención en el camino que une Piñera con Morató, que fue remodelado y pavimentado a lo largo de sus 39 kilómetros, confiriéndole buena conectividad a gran parte de la zona este del departamento.
Olivera, quien hace pocas horas anunció “la obra de urbanización más grande de la historia” de la Intendencia en Nuevo Paysandú, destacó el impacto de estas intervenciones en localidades del interior, cuyos habitantes aseguran que “hacía décadas que no se hacían cosas”.
“Eso en lo institucional reconforta, porque la Intendencia está llegando a los lugares más lejanos”, subrayó.