Nicolás Olivera dejó inauguradas las obras integrales de urbanización del Barrio Chaplin

Este sábado quedaron inauguradas las obras de urbanización integral del Barrio Chaplin, en la zona noreste de la capital departamental. El Intendente Nicolás Olivera, acompañado por otras autoridades departamentales y nacionales, encabezó la instancia de habilitación de una intervención que entre otros detalles incluyó pavimentación de calles con carpeta asfáltica, generación de cordón cuneta y desagües pluviales, veredas y alumbrado, beneficiando directamente a más de 2.500 vecinos.

Otro barrio transformado

Finalmente llegó el día esperado. Tras sortear la incertidumbre de las alertas meteorológicas, este sábado, pasadas a las 20 horas, el Intendente Nicolás Olivera, rodeado de autoridades y vecinos de la zona, cortó la cinta que dejó oficialmente habilitadas las obras de urbanización del Barrio Chaplin, donde se invirtieron cuantiosos recursos económicos para dejar calles a nuevo con carpeta asfáltica, construir veredas e instalar una extensa red de cordón cuneta y desagües subterráneos que darán solución definitiva a muchas décadas de anegamientos como consecuencia de las lluvias.

El proyecto, que fuera ampliado por el propio Intendente para beneficiar a los habitantes del vecino barrio Río Uruguay, también contempló componentes adicionales incluidos para mejorar la calidad de vida de cientos de familias.

Los números son contundentes. El proyecto beneficia a más de 2.500 personas; demandó la utilización 7.470 toneladas de hormigón y se construyeron 18.000 metros cuadrados de veredas, 12.000 metros de cordón cuneta, 60 badenes, 100 vados peatonales; colocación de 250 columnas, más de 1.000 metros de redes de saneamiento y recuperación de la plazoleta, además de plantación de árboles e instalación de señales de tránsito verticales y horizontales.

Mucha gente peleó por esto

Si bien la ceremonia de inauguración estaba prevista para las 18 horas, pasadas las 17 el Intendente arribó a la zona de Éxodo y Solano García, donde se construyó un puente sobre las nacientes del arroyo La Curtiembre y desde allí, acompañado por vecinos y autoridades, encabezó una breve recorrida por las calles hechas a nuevo, para concluir en el cruce de Andresito y Joaquín Suárez, donde se había montado un escenario y donde además muchos vecinos se preparaban para la ceremonia.

Ante un gran marco de público, Olivera hizo explícita su “satisfacción y alegría” por la conclusión de un gran proyecto, una obra “por la que mucha gente peleó”, en especial los integrantes de la comisión de vecinos, quienes pelearon, insistieron, caminaron y finalmente consiguieron lo que tanto anhelaban.

“Pelearon en todo el sentido de la palabra. Lo hicieron para que las cosas salieran y también para que fueran más grandes y llegaran más lejos”, aseguró, refiriéndose a la ampliación del proyecto, que también beneficiará al barrio Río Uruguay y a muchas cooperativas de la zona.

También destacó el trabajo de los funcionarios de la Intendencia, cuya dedicación y profesionalismo hicieron posible la ejecución de una gran obra.

“No cambio una sola empresa por la mano de obra que tenemos, porque le han puesto cariño y dedicación. Siento orgullo de pertenecer a una institución que tiene gente como ésta”, enfatizó.

Agregó que los contribuyentes de Paysandú pueden estar tranquilos, porque el dinero “está llegando bien adonde tiene que llegar” y se invierte dándole prioridad a la mano de obra municipal, desde los equipos técnicos hasta quienes se encargan de la ejecución.

“Los funcionarios son los verdaderos responsables de esto”, afirmó el Intendente, quien entregó una plaqueta de reconocimiento a varios trabajadores de la Intendencia que participaron en el proyecto.

Lo macro y lo micro

Más adelante, Olivera se manifestó “orgulloso de ser un servidor público” y aseguró que tanto él como quienes integran su equipo, tienen una sola forma de trabajar: “transpirando la camiseta; dejando todos los días un poquito más”, así como cumpliendo con la palabra dada y de esta forma cuidando un capital tan importante como “la confianza de la gente”.

“No me voy a ir de la Intendencia con la sensación de que pudimos hacer algo y no lo hicimos porque no nos dio el coraje o la voluntad”, subrayó.

Como viene siendo habitual en sus alocuciones, Olivera consideró que más allá de la inversión, más allá del cumplimiento de una de las principales competencias del Gobierno Departamental, estas obras, por sus características, impactan directamente en la vida de los vecinos, tanto colectiva como individualmente.

Un proyecto de esta naturaleza, de estas dimensiones, también posibilita historias a menor escala, pero igualmente relevantes. Desde alguien que durante la noche elige caminar por una calle porque ahora está iluminada, hasta quien, ahora sí, puede salir de su casa a trabajar razonablemente temprano, porque hay veredas y la calle no está anegada por la lluvia. Una gran obra cambia un barrio, una comunidad, pero también toca vidas.

Olivera dedicó este logro a muchos, desde los que reclamaron hasta los que caminaron, transpiraron, pero también a aquellos que padecían inundaciones, no tenían calles, ni luces.

“Por ellos trabajamos y nos enorgullece”, aseguró.

Por último, a pocos días de conmemorarse un nuevo aniversario de la Defensa y toma de Paysandú, el Intendente ensalzó una vez más “el ADN del ser sanducero”, eso que nos hace característicos y que nos permite sobreponernos a las adversidades, desde una inundación hasta turbonadas y pandemias.

“Juntos salimos adelante y vamos a seguir saliendo adelante juntos”, enfatizó.

Que el barrio no caiga

En la ceremonia de inauguración también hicieron uso de la palabra varios integrantes de la comisión de vecinos: Héctor Texeira (presidente), Daniela Poggio y Jennifer Stugelmayer.

Embargado por la emoción, Texeira agradeció al Intendente, a las demás autoridades y “a todos los funcionarios que trabajaron en la obra”.

“Es una alegría tremenda inaugurar esta obra que tanto anhelamos”, afirmó y exhortó a todos los vecinos a “cuidar lo que se hizo” e impedir que “el barrio no caiga y esté como estaba antes”.

“Al contrario, tenemos que llevarlo para adelante”, agregó.

Ya pasadas las 20, el Intendente, acompañado por el secretario general Fermín Farinha y por varios vecinos, además de un grupo de niños, cortó la cinta y dejó oficialmente inauguradas las obras.

Poco después, tal cual estaba previsto, se llevó a cabo el cierre artístico, a cargo de la reconocida banda tropical “Los Negroni”.